1. Os agradezco el apoyo que me ofrecéis y el ánimo que me transmitís para levantar una bandera tan emocionante como expresiva que tiene como lema recuperar el orgullo de ser y de sentirnos asturianos.
2. Somos un país pequeño. País, sí, que no se escandalice nadie, el país de los paisanos asturianos, el país del que hablaban Campomanes o Toreno cuando hace dos siglos crearon la “Sociedad Patriótica de Amigos del País de Asturias”, el del patriotismo asturiano al que se refería una y otra vez nuestro gran Jovellanos. Una sociedad que había elegido como escudo un hormiguero, símbolo de la laboriosidad y de la cooperación, tan necesarias entonces como hoy para favorecer el desarrollo del Principado de Asturias.
3. Hablo de patriotismo asturiano, y a mucha honra, inspirado por Jovellanos, porque tuve la fortuna de vivir en la plaza del seis de agosto de Gijón, frente al busto en bronce de Jovellanos, transitaba diariamente por la calle Jovellanos, me cortaba el pelo en la peluquería Jovellanos, hacía las reválidas del bachillerato en el Instituto Jovellanos, iba al cine y a la zarzuelas al teatro Jovellanos, o a conferencias al Ateneo Jovellanos, y hoy me honro en ser miembro de honor del Foro Jovellanos. Por eso no aceptaré que nadie de este país nuestro llamado Asturias, tenga que esconder su admiración ni su identificación con el hijo más ilustre de nuestro Principado.
4. No tienen que temer demasiado nuestros amigos que no nos conocen bien. Como señaló hace años el profesor recientemente fallecido Manuel Álvarez hace años en su conferencia en el Ateneo de Gijón, “Jovellanos fue un patriota grande de su patria chica. Y, cuando fue preciso, supo ser un patriota excelso de la patria grande”. Invitemos a esa gente que nos desconoce a descubrir que en Asturias, desde la izquierda a la derecha, sabemos unir el sentimiento de autoidentificación con nuestra patria chica, al sentimiento de autoidentificación con nuestra patria grande. Asturias y España son inseparables para cualquier asturiano. Tal vez por eso el gran Ortega reconoció “como hecho diferencial de nuestra tierra la claridad política de la que surge por primera vez la gran política nacional, tras la fundación del reino astur-leonés”. Los asturianos tenemos que aprender mucho cada día, pero nadie tiene que venir desde fuera a darnos clase de cómo ser y sentirse buenos españoles. Nadie.
5. El problema es que
-los que no nos conocen porque estamos lejos y mal comunicados,
-los que nos infravaloran porque somos poco más de un millón de asturianos,
-los que nos desprecian porque contemplan nuestro deterioro creciente sin apenas quejarnos, se confunden al negar una y otra vez nuestro derecho a formar parte del interés general de España, y al pensar que siempre aceptaremos con resignación ser ignorados en la toma de decisiones de los dirigentes nacionales.
Se confunden porque en Asturias hay un profundo y viejo sentimiento de país enraizado en la gente que no renunciará nunca a sus convicciones personales por la imposición de un anacrónico deber emanado de una disciplina o de un liderazgo nacional mal entendidos.
Se confunden porque en Asturias y fuera de Asturias hay muchas personas que entre la dignidad personal y las obligaciones colectivas, escogerán siempre el bando de las convicciones.
Y aquí estáis para demostrarlo muchas personas de Mieres y del valle del Caudal, unidas en torno al proyecto que persigue la recuperación del orgullo de ser asturianos.
6. Hoy estamos reunidos en Mieres. tanto. Mieres es el corazón de Asturias.Tan minera, tan industrial, tan campesina y tan truchera como salmonera (Madoz hablaba de los muchos salmones que se pescaban en el río Caudal), tan montañosa como rural. Pienso que Mieres se parece a Asturias como Asturias se parece a Mieres. Por eso, recuperar el orgullo de ser asturianos pasa por recuperar el orgullo de ser mierenses.
7. Mieres es la patria de grandes asturianos:
-el moderado José María Bernaldo de Quirós, marqués de Camposagrado, cuya familia poseía en su palacio una espléndida colección de pintura hoy dispersa, y que lanzó un célebre Manifiesto del hambre defendiendo la dignidad y la vida de los campesinos asturianos, contra el Gobernador Civil de su época.
-Teodoro Cuesta el gran compositor, poeta y escritor en bable.
-Vital Aza, el médico de Pola de Lena que quiso ser periodista y escritor, contemporáneo de Clarín y de Palacio Valdés
-Vital Alvarez Buylla un gran médico y un buen alcalde de la democracia, que tuvo la suerte de tener al lado en la corporación de Mieres a otro gran médico, Enrique Portilla, a quien siempre pondré de ejemplo de político dialogante, en una etapa muy difícil para defender nuestras ideas.
-Aniceto Sela padre de la extensión universitaria, integrante de lo que Joaquín Costa llamó el memorable Grupo de Oviedo (junto con otro Álvarez-Buylla (Adolfo), Altamira, Clarín, Canella, Posada) protagonistas de la mejor historia de nuestra Universidad
-Manuel Llaneza, que aunque habia nacido en Lada, aquí se hizo sindicalista y extraordinario dirigente minero hasta fundar y dirigir al SOMA en Mieres, cuyo centenario acaba de celebrarse, de donde fue además gran alcalde.
8. Mieres minera e industrial:
-La histórica Mina Baltasara o el Pozo Barredo, por citar algunos ejemplos.
-Hulleras del Turón empresa desarrollada por los vascos de Altos Hornos y que iba a impulsar el ferrocarril Vasco-Asturiano que promoverá la conexión del valle del caudal con San Esteban de Pravia y con la costa.
-La Fábrica de Mieres
9. Mieres y su concejo, además de cuna de grandes profesionales (de grandes operarios e ingenieros) supieron integrar y aprender de catalanes como Jerónimo Ibran, que fue hace más de un siglo director de la Fábrica de Mieres y de la Escuela de Capataces, y el alma de la Cámara de Comercio de Oviedo, y de emprendedores forasteros de origen inglés (Loring), o francés (Guilhou).
10. Mieres la reconversión de los ochenta y las oportunidades de los Fondos Mineros. El tejido minero e industrial, hace tres décadas fue desmantelado por una reconversión desertizadora. Pero en 1996, mediante un gran acuerdo entre los sindicatos y el gobierno de España, pusimos en marcha los Fondos Mineros, que permitieron, como diría Jovellanos:
-“Las nuevas luces” del Campus de Mieres, orgullo de Asturias, continuación de la gran Escuela de Capataces levantada hace siglo y medio que formó a los mejores profesionales mineros y siderúrgicos de la región durante décadas y décadas….
-La “superación de los obstáculos” de las malas comunicaciones, con la nueva Autovía Mieres-Langreo-Siero-Gijón, que dotó al Valle del Caudal de una conexión transversal que prolongaba con una viá moderna de alta capacidad la que llegaba al Valle del Nalón.
-La implantación de nuevos proyectos, como los de Thyssen, o los de Rioglass, para cambiar el monocultivo minero, diversificar el tejido empresarial, crear actividad, fijar población..
11. Los medios de comunicación nos recuerdan cada día que volvemos en las Cuencas a los años durísimos de la reconversión. En la Cuenca del Nalón, amenaza de cierre del Taller de Barros de Duro-Felguera, ERE de Alas Aluminium, cierre práctico de Venturo XXI. Y en la Cuenca del Caudal, crisis por ejemplo de Rioglás.. Gran parte de lo nuevo patas arriba, pese a tanta ayuda pública en algún caso y tanta ilusión por crear un nuevo entramado económico que garantizara el futuro de las comarcas minaras, que diera nuevas oportunidades a los jóvenes…
12. Asturias, entre tanto, padece hoy un gobierno regional que gasta irresponsablemente el dinero:
-en publicitarse por medio de desayunos y comidas en Madrid,
-en financiar los medios de comunicación afines para que desvergonzadamente propaguen que en las cuencas se pasó del “carbón al ratón”.
-en gastar sin control y con unos sobrecostos récord a nivel español en las tres principales obras públicas de su titularidad. Casi 400 millones € en El Musel (215 M€), el Hospital Central (100 M€) y la “Y” de Bimenes (45 M€).
13. Y que hace algo peor, como es dejar tirados en la estacada a los sindicatos mineros, abandonados en el conflicto planteado con el futuro del carbón, como los dejó en la negociación de las ayudas al sector estos últimos meses, porque nunca pasó de las palabras a los hechos. Es evidente que las Cuencas no se merecen un gobierno así.
14. La política de escaparate que ha venido soportando Asturias, que nos devuelve a las peores crisis del pasado (cuando tuvimos que emigrar a América o a Bélgica, como muchos de los aquí presentes recordareis), que hace que seamos la región de Europa ¡no de España, de Europa! con menor crecimiento demográfico (como resultado de la falta de empleo y oportunidades) no puede continuar. Hay que acabar con este viaje al fracaso en el que nos metieron todos, unos en el gobierno y otros en la dulce oposición…porque en Asturias no ha habido ni gobierno ni oposición durante demasiados años, y los asturianos no nos merecemos esta degradación institucional sin precedentes.
15. Por eso queremos recuperar el orgullo de ser asturianos, orgullo que consiste en defender lo nuestro, nuestra lengua (el bable), nuestra historia, nuestra etnografía, nuestro patrimonio industrial, nuestro paisaje (que Asturias sea de verdad un paraíso natural, como propuso con acierto Pedro de Silva) y nuestro territorio, porque, además, esa recuperación identitaria, cultural, histórica o medioambiental será un gran yacimiento de empleo, que es lo que necesita nuestro país para empezara recuperar su orgullo y su destacado lugar en el mapa de España.
16. Si aceptáis el reto y lo compartís con nosotros, sabed que nuestra tarea es histórica. En este año del bicentenario de la muerte del gran Jovellanos debemos de continuar su tarea, que no fue otra que hacer una Asturias próspera y moderna, abierta al mundo y al progreso.
Nuestra tarea consistirá en convertir nuestro país en una región bien hecha de la que los asturianos nos sintamos orgullosos y, sobre todo, nuestros hijos vuelvan a echar aquí sus raíces, lo mismo que otros muchos españoles y otros muchos europeos, pioneros de nuestro desarrollo en el pasado a los que debemos invitar para construir el futuro de Asturias. Merece la pena intentarlo.
Por Francisco Álvarez-Cascos
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