El Pais publica esta interesante entrevista de
Carmen Pérez-Lanzac a
Jim Parsons, Sheldon Cooper en
The Big Band Theory.
La serie, una de las más interesantes del panorama televisivo, tiene en
Parsons el pilar fundamental sobre el que se sostiene toda la historia. Los
Emmy han reconocido su labor en la última edición, otorgándole el premio al
Mejor Actor en Serie de Comedia.
Jim Parsons (
Houston,
Texas, 1973 ), apareció en pequeños papeles en cine y televisión hasta que, como caido del cielo, le llegó la oportunidad de un papel por el que siempre será recordado como el científico genial y con síndrome de
Asperger al que su compañero de piso Leonard, su vecina Penny y el resto de sus amigos tienen que soportar.
Más de uno se va a llevar un disgusto al saber que
Parsons no es un fiel seguidor de las aventuras del Enterprise, como los Sheldon Cooper. La vida es dura.
No, yo nunca he visto un episodio completo de Star TrekEntrevista con Jim Parsons (Emmy 2010), el actor que interpreta a Sheldon Cooper (The Big Bang Theory), uno de los personajes televisivos más brillantes de los últimos años. TNT acaba de estrenar la cuarta temporada de la serie.
Racional, sincero hasta bordear la mala educación, maniático, superdotado y socialmente inadaptado, el físico teórico Sheldon Cooper es uno de los personajes televisivos más brillantes de los últimos años. A su hallazgo se debe buena parte del éxito de la serie
The Big Bang theory, que en España ofrecen
Neox y
TNT (que acaba de estrenar la cuarta temporada, se emite los viernes a las 22:15), y que protagonizan cuatro jóvenes científicos y su vecina, una camarera aspirante a actriz nada sesuda que les hace de contrapunto.
Jim Parsons, el actor de 37 años que interpreta a Sheldon (que por cierto ronda los 29 años), ganó el
Emmy a mejor actor de comedia en la pasada edición, una grata sorpresa teniendo en cuenta el peso de los otros nominados:
Alec Baldwin (52 años,
Rockefeller Plaza),
Larry David (64,
El show de Larry David),
Tony Shalhoub (57,
Monk) y Steve Carell (48 años,
The Office). Sólo
Matthew Morrison, de 32 años y nominado por
Glee, era más joven que
Parsons.
Al teléfono desde
Los Ángeles, hablar con
Jim Parsons se parece bastante a hacerlo con Sheldon. Al igual que su personaje televisivo él también se expresa con precisión y pronunciando cada sílaba. Incluso la tonalidad recuerda al retintín de sabelotodo del doctor Cooper.
Pregunta. ¿Qué se siente al arrebatarle el
Emmy a
Alec Baldwin o
Larry David?
Repuesta. Suena irreal. Es como si no hubiera pasado. Tengo el trofeo en casa, pero lo miro y es como si fuera falso.
P.
Baldwin le mandó un regalo con una nota un tanto peculiar.
R. Me mandó una cesta de quesos y vinos con una notita que decía: "Eres un cabronazo encantador y lleno de talento. Enhorabuena". Me pareció un gesto divertido, muy de
Alec Baldwin, pero cuando lo conté en el show de
David Letterman hubo quién lo malinterpretó.
P.
The Big Bang Theory ha ido ganando fans de forma gradual.
R. La escalada ha sido muy sana, y eso nos ha librado de mucha presión. Los espectadores nos han descubierto por el boca a boca, a través de amigos, conocidos, algo que sucede o no sucede.
P. ¿Diría que
The Big Bang theory es como
Friends pero protagonizado por freaks?
R. Diría que las dos series tienen mucho en común: ambas comedias han ido desarrollando a los protagonistas poco a poco, de manera que los espectadores los conocen bien. Y eso es gracias a los guionistas, que son súper leales a los personajes.
P. ¿Cómo es su relación personal con Sheldon?
R. Le tengo mucho cariño, pero... (largo silencio). No lo sé, es una mezcla de sentimientos... (suspiro). Me encantaría ser más específico, pero no puedo.
P. Le oigo y es como oír a Sheldon. ¿Cuánto de Jim hay en él?
R. De forma consciente, nada, pero inevitablemente hablo así y me muevo de cierta forma. Creo que se debe a que soy bastante alto, mido 1,82 metros.
P. ¿Por qué se le coge tanto cariño a un personaje tan maniático como Sheldon?
R. Porque es honesto. Al igual que los niños no le pone un filtro a sus pensamientos. Dice cosas ofensivas sin maldad ninguna y creo que el espectador se siente liberado al verle. Además es muy vulnerable, dan ganas de defenderle.
P. ¿Cree que ha ido ganando peso en la serie?
R. Todos forman parte del engranaje. Hace poco hemos rodado dos episodios sin Kaley [Cuco, la actriz que interpreta a Penny, la vecina], que se ha roto la pierna, y se ha notado su ausencia. Todos los personajes se complementan.
P. Sheldon fue un niño raro. ¿Y usted?
R. Era bastante normal, con mis excentricidades y mis altos y bajos. He pensado mucho en esto últimamente. Hubo tiempos en que me sentí solo y que se metían conmigo, pero ahora veo que es la experiencia media. Nunca me faltaron amigos. En ocasiones me sentí fuera de lugar, pero en otros estaba en mi salsa.
P. ¿A usted se le daba bien la física?
R. ¡Oh, no! (risas). Sigo sin entender nada de lo que hablamos. Pero está bien, así no me olvido de que estoy interpretando a alguien con un gran don que mi mente desde luego no comparte.
P. ¿Usted también es fan de
Star Trek?
R. Nunca he visto un episodio completo, ni una película. Cada vez que Sheldon hace referencias a ciertos episodios me los veo en
Youtube.
P. Sheldon tiene las camisetas más bonitas del mundo.
R. Sí, y soy incapaz de comprármelas porque me siento taaan Sheldon.
P. En la cuarta temporada se echa novia.
R. No es una novia, aunque eso es lo que querrían todos los demás. Es alguien con quien no se siente raro. Es la primera vez en tres años que le pasa.
P. Con la excepción de la madre de Leonard.
R. Oh, es verdad, tienes razón, si incluso se dan un beso. Es la segunda.
P. ¿Tiene algún amigo de verdad entre el resto del casting?
R. Somos amigos hasta cierto punto. Siento que la respuesta sea tan aburrida, pero es así. Nos llevamos estupendamente porque estamos muy centrados en el trabajo. Nuestro objetivo común es hacer una buena serie.
P. Para la cuarta temporada que acabáis de estrenar os han subido muchísimo sueldo. ¿Qué se siente?
R. Es maravilloso. Llevo tantos años actuando... Sabía que siempre trabajaría como actor, aunque fuera de noche y gratis como he hecho tantas veces. El dinero es la guinda del pastel. Podría ser feliz sin ganar dinero en televisión, pero la idea de poder ahorrar y vivir de este trabajo es más que un sueño hecho realidad.